Ana Rosa Quintana, una de las figuras más prominentes en el panorama televisivo, generó gran expectativa al anunciar en su programa del martes una exclusiva sobre el hijo de Carmen Borrego y Paola Olmedo. Prometió a sus espectadores un vistazo a dos horas de metraje que narraban la tumultuosa boda de la pareja, anticipando una serie de acontecimientos que mantendrían al público pegado al sofá. Sin embargo, la emisión de estas imágenes nunca llegó a materializarse, dejando a los espectadores con las ganas y sin explicaciones claras sobre el cambio de planes.
Luis Pliego, director de la revista Lecturas y portador del material, se encontraba presente en el set del programa, preparado para revelar los detalles de este exclusivo contenido. Sin embargo, a pesar de las expectativas creadas, el segmento pasó desapercibido, sin mostrar ni un minuto del esperado metraje. Este giro inesperado no pasó desapercibido para la audiencia, que esperaba ansiosa la proyección de estas imágenes.
¿Qué sucedió para que Ana Rosa Quintana retractara su promesa? ¿Qué motivó la repentina decisión de no emitir el material exclusivo, a pesar de haber sido anunciado con gran entusiasmo? Según fuentes cercanas al programa, durante la emisión en vivo se recibieron órdenes explícitas de no mostrar las imágenes de la boda. Aparentemente, el propio Luis Pliego, a pesar de haber ofrecido el material para su difusión, se vio obligado a dar marcha atrás en el último momento, anunciando que no sería posible emitirlo.
El revuelo generado por este inesperado giro no pasó desapercibido. La frustración y decepción de la audiencia fue palpable, especialmente después de que Ana Rosa hubiera anunciado el exclusivo con tanta anticipación. Este incidente no solo afectó la reputación del programa, sino que también generó tensiones internas y una sensación de malestar entre el equipo de producción.
Pero, ¿cuál fue el motivo detrás de este cambio repentino de opinión por parte de Luis Pliego? Según informantes de TardeAR, todo se debió a una llamada recibida por el director de Lecturas justo después del anuncio en el programa de Ana Rosa. Esta llamada pareció cambiar el curso de los acontecimientos, obligando a Pliego a revertir su decisión sobre la emisión del material exclusivo.
La persona que realizó esta llamada y que detuvo la difusión de las imágenes fue nada menos que el novio de Carmen Borrego, José María Almoguera. Según relatan nuestras fuentes, Almoguera contactó a Pliego visiblemente molesto, argumentando que el vídeo era ilegal y que no tenían conocimiento de que se iba a utilizar para una transmisión pública. Advirtió que tomarían acciones legales si el material era emitido sin su consentimiento.
Ante esta intervención directa del protagonista de la boda, Pliego se vio obligado a reconsiderar su posición. Consultó con los abogados de la revista, quienes confirmaron que, efectivamente, no se podía emitir el material sin autorización previa. Esta respuesta fue comunicada a los responsables del programa, causando un evidente malestar y tensión en el set, especialmente después de que Ana Rosa ya hubiera anunciado la exclusiva.