Los días recientes han sido especialmente difíciles para la familia Goyanes, marcados por una serie de tragedias que han dejado a sus miembros en un estado de dolor profundo. El mes de agosto, tradicionalmente asociado con vacaciones y descanso, ha resultado ser devastador para ellos. La pérdida comenzó a principios de mes con el fallecimiento de Carlos Goyanes, un reconocido productor, a la edad de 79 años. Este primer golpe ya había sumido a la familia en una profunda tristeza, pero lo que vino después fue aún más desgarrador. Apenas unas semanas después, el pasado lunes, la familia se enfrentó a otra noticia devastadora: la muerte inesperada de Caritina Goyanes, la hija mayor de Carlos, quien perdió la vida a la edad de 46 años. Por si fuera poco, durante el mismo período, se informó que Tito Goyanes, hermano de Carlos, había fallecido el domingo anterior, apenas 24 horas antes que su sobrina.
Estas pérdidas han dejado una huella imborrable en los corazones de la familia, y el dolor que sienten es insondable. Las despedidas siempre son dolorosas, pero en este caso, la repentina e inesperada partida de Caritina ha sido especialmente difícil de procesar. Caritina no padecía ninguna enfermedad conocida que pudiera haber anticipado un desenlace tan trágico. De hecho, las causas de su muerte están relacionadas con un infarto que sufrió, y que resultó irreversible a pesar de los esfuerzos médicos una vez que llegó al hospital. El impacto de esta pérdida ha sido brutal para su familia, especialmente para su hermana menor, Carla Goyanes, quien se ha visto obligada a enfrentar una realidad que parece más una pesadilla que un hecho consumado.
Carla, de 41 años, no ha tenido tiempo de asimilar lo ocurrido, pero a pesar del dolor y la conmoción, ha encontrado la fortaleza para rendirle un homenaje a su hermana a través de las redes sociales. En medio de su duelo, Carla ha querido compartir con el mundo lo que Caritina significaba para ella y la promesa que ahora le hace en su memoria.
La relación entre las dos hermanas siempre fue muy estrecha, algo que demostraron durante años y que se pudo evidenciar nuevamente en el entierro de su padre a principios de agosto. La conexión entre ellas era palpable, y la muerte de Caritina ha dejado un vacío imposible de llenar. En un emotivo gesto de amor y respeto, Carla decidió utilizar sus redes sociales para publicar un video en el que recopila distintos momentos compartidos con su hermana, bajo la mirada atenta de su madre, Cari Lapique, quien siempre fue un pilar fundamental en sus vidas.
Este video no solo es un tributo a los recuerdos que compartieron, sino también una forma de que Carla exprese su dolor y su amor por Caritina, describiéndola como la mejor hermana que alguien podría tener. En su mensaje, Carla confiesa que, ante una tragedia de tal magnitud, las palabras parecen insuficientes, una realidad que ha sido recurrente en estos días. Las palabras de Carla, cargadas de emoción, también destacan la faceta de Caritina como madre, un rol que ella desempeñaba con una dedicación y amor excepcionales, según las palabras de su hermana.
En su despedida, Carla no solo expresa su dolor, sino que también hace una promesa solemne, una promesa que está íntimamente relacionada con la maternidad de Caritina. “Ten por seguro que voy a ser muy fuerte y voy a cuidar a tus hijos todo lo que me dejen, como si fueran míos. Voy a cuidar a mamá por las dos y voy a cuidar a Matos porque sé cuánto le querías. Verás crecer desde el cielo a tus hijos y vas a estar muy orgullosa de ellos”, escribió Carla, mostrando así una determinación que nace del amor y la responsabilidad que siente hacia su hermana fallecida.
Con estas palabras, Carla reafirma la unión indisoluble que compartía con Caritina y se compromete a velar por el bienestar de sus sobrinos, asegurándose de que no les falte nada en un momento en que han perdido a su madre. Este compromiso de Carla también se extiende a su madre, Cari Lapique, quien ha sufrido dos pérdidas terribles en un corto período, algo que será muy difícil de superar. Además, Carla tampoco se olvida del marido de Caritina, Antonio Matos, con quien compartió un doloroso abrazo durante el velatorio en Marbella, donde descansaban los restos mortales de Caritina.
El dolor de Carla es evidente, y sus palabras reflejan una mezcla de incredulidad y tristeza profunda. En su carta de despedida, Carla escribió: "’No tengo palabras’ es la frase que más me han repetido estos días. Yo tampoco, pero este es mi pequeño homenaje para ti, que eras única". Este homenaje es un intento de darle sentido a una situación que parece insensata, una manera de rendir tributo a una hermana que partió demasiado pronto. "Te has ido demasiado pronto y llena de planes e ilusiones. Nos faltaba mucho por hacer. Todavía no me creo que no vayamos a hablar más, ni abrazarnos, ni consolarnos, ni disfrutar más de la vida juntas con nuestros hijos", reveló Carla, compartiendo así el abismo que siente ante la ausencia de su hermana.
Carla también recordó con cariño los momentos compartidos con Caritina, desde las risas hasta las discusiones, los bailes y los viajes, celebrando las cualidades que hacían de Caritina una persona tan especial. “Eras única e irrepetible, la más generosa, divertida, trabajadora, disfrutona, con una fe que siempre he envidiado y que te ha hecho ser muy feliz los últimos años de tu vida. No conozco a nadie con más amigas que tú, algunas como hermanas. Has sido una madre entregada, una hija súper atenta a tus padres y, aunque seamos totalmente distintas, eres la mejor hermana que he podido tener”, continuó Carla en su emotiva carta.
La muerte de Caritina ha dejado un vacío enorme, y el dolor que siente Carla es evidente en cada palabra. Su escrito refleja la profunda tristeza que siente al pensar en todo lo que ya no podrá compartir con su hermana. "Hace unos días me decías que no te creías que todo esto era por papá, y ahora yo no puedo creerme que sea por ti", concluyó Carla, expresando la incredulidad y el desconsuelo que la embarga ante lo ocurrido.
La carta de Carla fue escrita durante su viaje hacia Madrid, donde Caritina sería enterrada el miércoles siguiente junto a las cenizas de su padre en el tanatorio de La Paz en Tres Cantos, un lugar que ahora alberga los restos de dos personas que fueron fundamentales en la vida de la familia Goyanes.
Este viaje a Madrid, y el hecho de que Caritina sea enterrada junto a su padre, simboliza de alguna manera la unión familiar que siempre caracterizó a los Goyanes, una unión que ahora se enfrenta a la prueba más difícil. Para Carla, la pérdida de su hermana y su padre en tan poco tiempo ha sido devastadora, y el dolor es un compañero constante en este viaje de duelo.
La tragedia que ha golpeado a la familia Goyanes en este mes de agosto es un recordatorio brutal de lo frágil y efímera que puede ser la vida. La repentina muerte de Caritina, sumada a las pérdidas previas de su padre y su tío, ha dejado una marca indeleble en sus seres queridos, quienes ahora deben encontrar la manera de seguir adelante en medio del dolor. La promesa de Carla a su hermana es un reflejo de su amor incondicional y su deseo de honrar la memoria de Caritina cuidando a aquellos que ella amaba.
En este momento de duelo, la familia Goyanes se enfrenta a una realidad que nunca imaginaron, una realidad en la que la ausencia de Caritina será profundamente sentida. Las palabras de Carla, aunque dolorosas, también están llenas de amor y determinación, mostrando que, a pesar del sufrimiento, ella está dispuesta a cumplir con la promesa que le hizo a su hermana, asegurándose de que su legado de amor y cuidado continúe a través de los años.