Joaquín Torres está atravesando uno de los momentos más difíciles de su vida. El reconocido arquitecto, conocido por trabajar con numerosas celebridades, ha enfrentado cuatro operaciones en los últimos meses. Aunque inicialmente todo parecía ir bien después de una exitosa cirugía de cadera que incluyó la colocación de una prótesis, una infección ha cambiado drásticamente su estado de salud. Desde el hospital, Joaquín ha compartido su angustia con el público, anunciando que se someterá a una quinta operación.
En un mensaje dirigido al programa 'Y ahora Sonsoles', Joaquín expresó su agradecimiento por el apoyo recibido: "Me llena muchísimo vuestro cariño y el de la gente. Es muy alucinante, estoy muy agradecido", dijo, visiblemente conmovido por el apoyo. Sin embargo, también compartió detalles sobre su difícil situación de salud.
El arquitecto relató su reciente calvario: "Hace dos semanas, Ángel (su médico) me abrió para descartar una infección de huesos, y como sale en los cultivos, hay que estar diez días mínimo. Ángel tenía todos los temores posibles porque tenía tres índices en los análisis muy elevados que hacían pensar que algo no funcionaba. El jueves pasado me hicieron una resonancia magnética para descartar un tumor cerebral y yo ya dije: 'Se acabó'", explicó. Estas declaraciones generaron preocupación entre los presentadores y colaboradores del programa, así como en la audiencia.
Aunque Joaquín había salido del hospital para un breve descanso durante la mañana, recibió una llamada de su esposo que cambió completamente la situación: "Me llamó Raúl, mi marido, preocupado. Me dijo que volviera que había un problema. Recibo un mensaje de Ángel que dice que hay una infección que tendremos que tratar dos semanas más con antibióticos, y tienes que estar ingresado. Es lo que sé, me he quedado un poco en shock, me puse a llorar", reveló con tristeza.
A pesar de las esperanzas de salir pronto del hospital, Joaquín tendrá que permanecer ingresado al menos dos semanas más: "Esto viene de los cultivos que pasaron hace 15 días y que se han manifestado hoy. No sé la trascendencia ni la repercusión que va a tener esto, porque no se me podía operar con infección de huesos, y es lo que tengo. Se ha manifestado en las placas que me pusieron hace cuatro meses para reformar la cadera, que no ha sido posible y viene de ahí. La operación fue bien, pero los resultados dicen que hay una infección", explicó con pesar.
Joaquín también mostró las secuelas de sus múltiples intervenciones quirúrgicas: "Llevo cuatro operaciones, la cicatriz es de 30 centímetros. Tengo toda la parte de la cadera con más de treinta puntos y estoy agotado. Mi organismo no puede más", afirmó. A pesar de todo, se comprometió a seguir las indicaciones médicas para recuperarse lo antes posible.
Además de sus problemas de salud, Joaquín está lidiando con conflictos familiares, especialmente con su hermano Julio. Aunque Julio ha tenido algún contacto con su padre, Joaquín se mantiene firme en su postura y no está dispuesto a ceder: "Mi hermano desde que murió mi padre no ha cesado en intentar una reunión con mi padre evitando que nosotros estuviéramos presentes. Yo he dicho que hagan lo que quieran y al final ha habido una reunión que me interesa entre poco y nada, porque no me creo nada de mi hermano".
Sin embargo, Joaquín está dispuesto a seguir el deseo de su difunta madre sobre cualquier otra consideración: "Siempre voy a respetar la voluntad de mi madre, y si hay paz y reconciliación la querría y yo obviamente, aún no importándome nada mi hermano, si hay un camino para llegar a la paz lo voy a aceptar. Aunque no se lo merezca, y por mi parte muerto", sentenció con determinación.
En estos momentos difíciles, Joaquín cuenta con el apoyo inquebrantable de su esposo, Raúl Prieto. La pareja se casó después de años de relación discreta y ahora enfrentan juntos este desafío. A pesar de las dificultades, Joaquín está decidido a recuperarse y superar esta prueba en su vida.